viernes, 30 de octubre de 2009

“Se prendió la fiesta, se lleno el teatro y quedaron los rumores”



I Seminario de la Diversidad Sexual[***]
Cartagena 30 de Octubre de 2009



Cartagena se vistió de diversidad la noche del 27 de octubre del presente año (2009). En el emblemático teatro Adolfo Mejía de Nuestra ciudad, y con la participación de más de 500 personas se llevo a cabo la primera (y ojala no la última), confrontación de la ciudad con una realidad invisibilizada por el machismo de sus habitantes. Y es que la diversidad de nuestra ciudad no se reduce solo al tema de la sexualidad (porque siempre ha existido la diversidad sexual), lo que se visualizó la noche del 27 de octubre fue la pluralidad de opiniones con la que convive el cartagenero promedio.

Más que un problema o una enfermedad (como lo hicieron parecer por mucho tiempo sicólogos, médicos y fundamentalistas religiosos), las disidencias sexuales son preferencias distintas a la hegemónica, y hoy cobran una fuerza discursiva para visibilizar un orden que excluye, maltrata y denigra a lo que se presenta distinto a su realidad. Una realidad MACHISTA, ADULTISTA, MISOGINA y HOMOFOBICA que se contrae cuando el otro distinto confronta su “normalidad”; una realidad que señala, juzga y margina aquello que no conoce sino por las referencias de un libro que se escribió hace 2000 años atrás; una realidad que se cierra frente a lo que hoy dejó de vivirse tras las paredes de un cuarto y toma sentido y significación en las prácticas diarias de nuestra sociedad.


El teatro se lleno y quedaron los rumores.

La homofobia, y la transfobia son los patrones de discriminación y maltrato, con los que tienen que convivir a diario los sujetos que tienen prácticas sexuales con sujetos de su mismo sexo. La mayor represión de estas prácticas proviene de aquellos que se niegan a las transformaciones de los espacios y de las opiniones del otro. Para algunos cartageneros, la sexualidad es exclusivamente masculina y en ese sentido la satisfacción de la mujer queda relegada al segundo lugar; peor aún, existen mujeres que no han experimentado ni siquiera un orgasmo en sus vidas, muchas porque no saben qué es eso y otras porque el hombre que tienen solo se preocupa por satisfacerse él.

La sexualidad siempre ha estado sumida dentro del anonimato, nadie pregunta sobre lo que pasa detrás de las paredes de una habitación; sin embargo, incomprensiblemente todos nos asumimos como heterosexuales (hombres que gustan de mujeres o viceversa). Pero cuando alguien asume su sexualidad distinta a la que todos creen que tenemos, la reprobación, discriminación y posteriormente en algunos casos, el maltrato proviene de los sectores religiosos de nuestra ciudad

¿Y dónde queda el amarnos como hermanos?

Las prácticas sexuales, paradójicamente, para algunos se convierte en la imagen que los identificara de ahora en adelante frente a los demás sujetos; entonces, el sujeto deja de ser Persona (Ciudadano con un cuerpo de derechos que lo protegen) y se convierte en el Homosexual, la Lesbiana, el Travesti, el Bisexual y el o la Intersex. Luego vienen los señalamientos, la estigmatizaciones, la discriminación y por último, el fenómeno que debería ser repudiado por todos, el asesinato. La sociedad cartagenera repudia a las personas de prácticas sexuales distintas, pero no se pronuncia frente a los asesinatos de estas personas (hijos, hermanos, padres, trabajadores, personas comunes y silvestres que comparten a diario con las demás personas comunes y silvestres) y cuando se promociona un evento de estos, inmediatamente se engalanan con los mejores versículos y juzgan y castigan a quienes pensamos distinto a ellos.

Por eso, la gente se pregunta, al igual que nosotros, el impacto que tiene un evento que “saca del closet” la sexualidad de nuestra ciudad; y es entonces cuando aparece nuestro opus dei criollo (compuesto de cristianos, políticos, machistas, homofóbicos, homosexuales tapiñados…etc.) a señalar lo que la santa palabra dice alrededor del tema de la sexualidad: contra natura... anormales… corruptores de la sociedad… enfermos… depravados… los espera la séptima caldereta del infierno… Estas y otras opiniones abundan a lo largo y ancho de nuestra ciudad y todos tienen (menos nosotros) voz y voto para decidir lo que es normal en el terreno de las prácticas sexuales.

Lo peor es que según ellos el sexo no ha evolucionado y siguen imaginándose nuestra sociedad como aparece en la sagrada biblia: hombre/mujer, reproducción coitocéntrica, hijos, familia, dios feliz y todos estamos felices. Este anacronismo societal (querer que nuestra sociedad se parezca a una sociedad de hace 2000 años atrás), excluye el papel individual que tenemos los sujetos para escoger nuestra sexualidad, el papel importante de la autonomía en la construcción y desarrollo de la comunidad y el papel del la libre elección (ya sea de sexo, religión o práctica sexual) que tenemos las personas. Por otro lado, nuestro opus dei (el cartagenero) teme que al visibilizarse este tipo de prácticas, la ciudad completa va a terminar por reproducirlas, es decir, si salen las lesbianas, gays, travestis, bisexuales e intersexos (población LGBTI), todos nuestros niños terminaran por convertirse en alguno de ellos.

La variedad de opiniones provienen de todos lados y los disensos (más frecuente que los consensos) muchas veces se deben a las lógicas política-homofóbicas y judeo-cristianas que imperan nuestros espacios públicos de vida. Los intereses de una mayoría se imponen frente aquellos que pensamos, vivimos y sentimos diferente, y lo peor es que se nos discrimina, excluye, marginaliza y se nos mata, por nuestras prácticas sexuales.


La reflexión queda sobre la mesa:


¿Es natural, biológico, político y divino que se nos discrimine y se no asesine por nuestras prácticas sexuales?

La diversidad sexual siempre ha existido y su aprobación muchas veces depende del poder adquisitivo de la persona o en el caso más común, de si los sujetos son extranjeros. La ciudad se vuelve permisiva en algunos espacios y según algunas lógicas monetarias, lastimosamente el cartagenero y la cartagenera promedio, l@s de las prácticas sexuales distintas a la común, ese tiene que conformarse con llevar a feliz término sus idílicos encuentro en lugares incognitos que muchas veces resultan peligrosos para cualquiera.

Por último, aunque consideramos que Cartagena es una ciudad de hombres y para hombres (machista), lo que está en juego con este tipo de eventos no es la sexualidad de sus habitantes, sino el acercamiento a una sexualidad que se presenta distinta y amplia, a la que normalmente nos enseñan en la familia, las escuelas y las universidades. Una sexualidad de elección (no impuesta), en una Cartagena de ciudadanos libres e iguales, como tú y como yo.



Calleshortbus, Por una Heroica abierta a las Disidencias

POR: GIAN CARLOS JULIO DE LA ROSA

[***] Calleshortbus felicita a la Corporación Caribe Afirmativo, el Colectivo Corpus Diversus, a los organizadores de la Macha por la Diversidad Sexual, a la Universidad de Cartagena, al Instituto de Patrimonio y Cultura (IPCC) y a la Alcaldía Mayor de Cartagena por los esfuerzos al tratar de articular a una sola Cartagena, en este caso una sola Cartagena diversa.

2 comentarios:

ECOS dijo...

Hola

Es de carácter prioritario destacar la labor de algunas organizaciones es la consecución de este seminario, pero la más destacable es que se abran las puertas en la ciudad para hablar de un tema que ha está inscrito en lo privado.Inscripción que ha limitado desde mi punto de vista la discusión de los derechos de los y las individuos para ejercer su sexualidad.

La sexualidad y le género son categorías plásticas es decir (expuesta a cambios) sin embargo parce que la norma heterosexual es atemporal y ahistórica. Considerando lo anterior se hace necesario la consolidación de espacios de aprendizaje para escuela, familia y otros dispositivos disciplinarios. Preciso esto porque este tema puede tomar un carácter eventista, más si tenemos en cuenta el momento festivo y carnavalesco de la ciudad.

Saludos Enormes

Kelly Inés Perneth Pareja

Anónimo dijo...

Antes de expresar mi profunda satisfacción con la consecución de un espacio público donde hablar de realidades, quiero felicitar a Calleshortbus por la elaboración detallada de este blog donde se vivencia un verdadero compromiso y conciencia y no un simple activismo propagandistico.

El Seminario de Diversidad sexual junto a las actividades acádemicas que lo complementan y la marcha por la diversidad sexual: son sin duda alguna un gran logro en materia de politicas públicas de cartagena, entendidas estas politicas como aportadoras a un cambio social que no va con imposición, sino con trabajo responsable.
"El conocer da poder" esto justifica que cuando preocupados por lo que nos circunda, nos alimentamos de la información objetiva que solo reitera cuan injusto es que todavia exista discriminación.
Es bueno empezar con algo y esta claro que es bueno emepezar haciendo el trabajo en nosotros mismos, isntruirnos, volvernos expertos de nuestra realidad y luego transmitirla consolidando un verdadero y efectivo reconocimiento.

Efraín de Jesús Jaraba Coronado.